Cacique de Renier Perfumes (Colección Taino)

S/980.00

Extrait de Parfum 50 ml

Agotado

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Descripción

Cacique es una fragancia inspirada en la vida del líder y guerrero de los indios taínos cubanos, el jefe de la tribu, a quien se le rendían todos los honores, el máximo escalón en la pirámide social, el jefe alfa y rey.
El perfume tiene una salida especiada de pimienta rosa y bayas de enebro redondeadas con ládano y neroli. Desde el comienzo la fragancia transmite sensación de poder y de ser una pieza diseñada para un público en concreto.
No todo el mundo nace con sangre real y por ende no todo el mundo es cacique, tampoco todos se van a enamorar de este perfume.

El neroli en sí mismo y la madera de pino equilibran la dulzura de la composición añadiendo además una sutil percepción de licor que enlaza muy bien con las notas del cuerpo.

Enseguida que el perfume comienza a secar el oud indio es el total protagonista, acompañado por el sándalo, aquí se ha utilizado un acorde de oud indio natural que no opaca el resto de los componentes que lo acompañan. Es un cuerpo bien mezclado que permite que el pachuli haga acto de presencia, intercalando oleadas de incienso y vetiver, mientras que el orris le aporta una nota sucia, seca y salvaje. De este modo se enfatiza esa sensación de poder y primitivismo presente en los pueblos indios del caribe.

Cacique es una fragancia amaderada especiada con cierto carácter oriental.
En la base del perfume nos encontramos nuevamente con la presencia del Oud, pero esta vez es cambodiano, más suave y ligeramente dulce que se potencia con el musk y la Vainilla.

Durante el colonialismo muchos caciques desafortunadamente terminaron sus vidas quemados en una hoguera. Como este perfume es un retrato histórico de un líder indio pues hemos añadido un ligero toque de caramelo quemado que nos hace una perfecta descripción de este dramático final.

Notas de salida: Ládano, bayas de enebro, árbol de pino, pimienta rosa, neroli
Notas de corazón: Oud hindú, sándalo, orris, Jazmín, pachulí, vetiver, incienso
Notas de fondo: Vainilla, oud de Camboya, caramelo, frambuesa, almizcle

Marca

RENIER

RENIER

"Artista desde niño. Renier es la tercera generación de una familia de artistas plásticos de la mayor isla del caribe. Desde pequeño jugaba con una bola de barro que su padre ponía en sus manos para poder trabajar. Así recreaba las formas que su primer maestro le dejaba como ejercicio, en ocasiones jugaba y en otras terminaba lleno de barro.

En los años de su juventud siempre fue un laborioso apasionado de muchas de las manifestaciones plásticas que le rodeaba, la pintura, el diseño, la cerámica... Muy pronto comenzó a interesarle la procedencia de ciertos olores de los materiales con los que trabajaba. Los disolventes de los pigmentos al óleo, el aroma que desprendía el cuero cuando era pirograbado, el olor de la barbotina y muchos otras experiencias olfativas.

Pero fue precisamente la escultura artística en maderas lo que más le cautivó y motivó sus intenciones relacionadas con las fragancias; La amargura del Guayacán, el dulzor del cedro o el precioso aroma de la Sabina le dieron la inspiración definitiva para sentirse atrapado por la magia de los perfumes y los deseos de experimentar.

Así nacieron los primeros experimentos con materias directas de la naturaleza, mezclados con alcoholes o agua.

Le gustaba clasificar los olores típicos que le rodeaban en su cuba natal, sobre todo los que encontraba en sus viajes a la casa de campo de sus abuelos, el olor del Galán de Noche, La pomarrosa, La fruta de la guayaba, las flores, entre muchos otros. Cerraba sus ojos y para perpetuarlos en su memoria los relacionaba con colores.

Se hacía muy complejo en la isla adquirir perfumes. Los recuerdos más inmortales que el artista guarda en su memoria de por aquellos días son perfumes como el Moscú Rojo, un clásico, y una de las mejores Fragancias que se podían encontrar en la Cuba de finales de los 90.

Después de encaminar satisfactoriamente su carrera plástica y una vez establecido en Europa fue cuando Renier pudo conocer de cerca grandes clásicos de la perfumería moderna.

De repente tenía dos pasiones, dos amores, dos mundos muy diferentes pero con muchas cosas en común, de algún modo tenía que conseguir unificarlos. Su primera idea fue realizar un perfume por exposición pero era poco, no se sentía lleno profesionalmente!

En esos años de búsqueda interior, fue cuando conoció al maestro Perfumista Daniel Josier! Quién comenzó a instruirle en los bellos caminos de la perfumería! De esta forma maduró su idea y decidió crear su marca de perfumes y crear cada perfume inspirado en uno de sus cuadros. Incluso ir construyendo ambos simultáneamente. Las primeras fragancias de Renier son el resultado de sus pinceladas y la cooperación con el propio Daniel Josier.

Es una bendición tener una doble motivación creativa. Renier no solo disfruta de sus pinturas, sino también de sus diseños para sus perfumes. Toda la imagen de sus productos, desde su botella hasta su caja, incluso su estilo de ofrecerse pasa por las manos de Renier.

Cada pincelada tiene su olor propio."